Conoce cómo fijar metas financieras para el futuro
Por supuesto, no quieres desperdiciar tus esfuerzos, deseas construir un patrimonio sólido. Para conseguirlo, requieres entender cómo fijar metas financieras para el futuro. Ya seas que desees una casa, vehículo, pagar la educación de tus hijos, cancelar un préstamo, consíguelo con las estrategias correctas.
¿Hace años que te has trazado algún objetivo y no has podido conquistarlo? Quizá requieras cambiar de visión, conquista tu libertad teniendo metas claras, una óptica realista y adoptando acciones congruentes con esos propósitos. Hablemos de cómo conseguirlo estratégicamente.
Escribe tus metas y clasifícalas
Cuando quieres fijar metas financieras lo primero que debes hacer es colocarlas por escrito. Estos parámetros te ayudan a seguir un plan de acción que es flexible y puede sufrir cambios. Pregúntate cómo quieres vivir de aquí a un año o en diez. Piensa en propósitos como los siguientes:
- Quiero reducir mis gastos en un 30%.
- Deseo liquidar todos mis préstamos actuales y la deuda en mi tarjeta de crédito.
- Deseo ahorrar para mi plan de jubilación.
- Quiero hacer una reparación integral de mi casa o apartamento.
- Busco crear un colchón financiero para posibles emergencias.
Ahora, luego de hacerte estos planteamientos, debes proceder a clasificar cada uno, así podrás concebir acciones congruentes para conseguirlos. No es lo mismo establecer metas financieras relacionadas con la familia que hacerlo con relación a propósitos de retiro o pago de deudas.
Priorízalos en función a la importancia que tienen, considera si son urgentes o no. Evalúa el impacto que tendrá cada uno en tu economía. Una vez sepas esto, concéntrate en aquellos que son más perentorios.
Un consejo, antes ir por los grandes proyectos primero aborda lo básico, como tener un colchón financiero, cancelar deudas o tener un seguro integral. Con este respaldo estarás más seguro para plantearte propósitos más ambiciosos.
Establece metas medibles
Tan importante como plasmarlas es colocar un lapso de tiempo en que deban cumplirse. De lo contrario, puedes arriesgarte a que estas sean postergadas o que no las concretes nunca.
Recuerda, tener objetivos claros es el primer paso para construir un futuro próspero, estos te guiarán en los movimientos que debas dar.
Determina aquellos que serán a corto, mediano y largo plazo. Usa este parámetro para orientarte:
- Corto plazo: estos pueden tener un lapso de entre uno a tres años máximo. Suelen ser tangibles y de cumplimiento inmediato. Un buen ejemplo sería ahorrar para comprar un electrodoméstico o disfrutar de unas vacaciones en familia el siguiente verano.
- Mediano plazo: tiene un cumplimiento con un horizonte máximo de 10 años. Se requiere de una mayor planificación y esfuerzo para concretarlos. Podría ser la compra de un vehículo u otra propiedad considerable.
- Largo plazo: se extienden más allá de una década y corresponden con proyectos muy importantes en la vida. Alcanzar el retiro o invertir en la propiedad de tus sueños son buenos ejemplos.
Tus metas deben ser SMART (específicas, mensurables, alcanzables, pertinentes, basados en el tiempo), solo así podrás tener claridad y sabrás si estás cerca de conseguir esas determinaciones. Pudiendo realizar ajustes en caso que no estés logrando resultados.
Observa la diferencia entre un objetivo que no está claro y uno SMART:
- Deseo ahorrar dinero para un auto. No es concreto, ni medible.
- Ahorraré $6,500 para la cuota inicial de un vehículo modelo X en los próximos 24 meses. Está planteado de forma clara, es concreto, posee un plazo y es medible.
Crea un presupuesto claro y realista
Cuando quieres fijar metas financieras para el futuro un factor clave es contar con un presupuesto preciso y realista. Al elaborarlo, podrás asignar los recursos de forma adecuada y tendrás más posibilidades de éxito.
Es importante que establezcas cuál es tu situación actual, este es el mejor punto de partida para conquistar tus proyectos. Considera todos los ingresos fijos y variables clasificándolos, también debes determinar los gatos recurrentes y esporádicos, así como aquellos que no son esenciales y de los cuales puedes prescindir.
Apunta los activos que posees, hablamos de efectivo, inversiones e inmuebles, también considera los pasivos, que son deudas, préstamos, tarjetas de créditos, entre otros.
Crea categorías para cada gasto, así podrás evidenciar aquellos que son superfluos, los que puedes reducir y tu comportamiento financiero.
Usa las opciones de banca móvil y aplicaciones para tener un control más preciso de tu presupuesto.
Ten un plan de acción
Este es un abordaje más completo que el presupuesto, constituye una guía integral de lo que debes hacer. Porque se incluyen estrategias certeras para lograr un ahorro consistente, hacer inversiones inteligentes y con gran rendimiento, gestionar deudas y resguardar tus activos.
Ten en cuenta diferentes opciones, obstáculos, escenarios y situaciones que se pudieran presentar y expón cómo solventarlas. Si sientes que esto se hace muy complejo, puedes solicitar ayuda o investigar cómo hacerlo online.
Revisa tu progreso
Este es un factor clave, requieres analizar tu desempeño y determinar si estás consiguiendo resultados. Hacerlo, te ayudará a replantear las metas financieras y corregir errores que estés cometiendo.
Hazlo de forma mensual o semanal, así tendrás un control más preciso. Una buena idea es configurar alertas en tu móvil para no olvidarlo.
¿Qué más puedes hacer?
¿Te preguntas qué otras cosas puedes hacer al fijar metas financieras? Existen muchas acciones a adoptar que te ayudarán a conquistar tus objetivos. Algunas de ellas son las siguientes:
- Configura transferencias automáticas a tu cuenta de ahorro, así no tendrás la tentación de usar el dinero para otros gastos.
- Realiza inversiones que estén adaptadas con tu perfil, ya sea que te sientas cómodo con las de bajo o alto riesgo.
- Solicita ayuda de un profesional, este te orientará acerca de lo que debes hacer para conseguir las metas que deseas.
- Usa la tecnología; existen muchos programas y aplicaciones que te ayudarán a establecer metas, así como a gestionar y tener control sobre tu dinero.
- Sé persistente, conquistar grandes metas requiere de paciencia, insistencia y determinación.
- Divide los grandes objetivos en metas que sean más pequeñas y fácilmente alcanzables.
- Procura que el pago de deudas sea uno de tus objetivos principales. Sobre todo, aquellas que tienen intereses altos y que implican el pago de tarifas por mora.
- Elimina los gastos hormiga, los cuales pueden sumar mucho dinero sin que apenas te des cuenta.
Beneficios de establecer metas financieras a futuro
Cuando te planteas metas financieras a futuro estarás a pocos pasos de tener una vida más próspera y segura. Además, disfrutarás de gran tranquilidad al saber que caminas en el sentido correcto y tomando acciones concretas. Veamos algunas ventajas que tendrás al adoptar el enfoque adecuado.
- Tomarás decisiones muy informadas acerca de tu dinero y recursos.
- Tendrás una gran claridad, sabiendo hacia dónde vas y todo lo que debes hacer para conseguir cada meta.
- Los propósitos claros te brindan una gran motivación, gracias a una relación consistente entre esfuerzo y recompensa.
- Disfrutarás de gran tranquilidad, tu estrés se reduce ya que estás tomando medidas y trabajando en pro de tu futuro.
- Desarrollarás más disciplina y habilidades financieras, algo que te seguirá ayudando para conquistar propósitos cada vez más ambiciosos.
- Lograrás una buena salud financiera y una mejor calidad de vida.
- Estarás más preparado para afrontar eventos inesperados como una emergencia sanitaria, accidentes, enfermedades o si te quedas sin trabajo.
- Experimentarás mucha satisfacción al ir conquistando tus metas de forma constante.
Definitivamente, cuando aprendes cómo fijar metas financieras para el futuro estarás en el punto correcto para mejorar tu vida y la de los tuyos.
Recuerda, el factor clave es la perseverancia y consistencia. Nunca te des por vencido, si te equivocas o sufres un revés, cambia de estrategia y sigue adelante.